En un estudio titulado "Riesgo, resistencia y reequilibrio en las cadenas globales de valor", los analistas de la compañía evaluaron, entre otras cosas, diversos peligros de un cierre de fabricación que duraría 100 días. Los impactos económicos considerados en el informe se desprenden de una amplia gama de posibles eventos, desde un ciberataque y disputas comerciales hasta conflictos militares y una pandemia, y varían en frecuencia, tiempo de espera y naturaleza.
Como resultado, los daños de una potencial guerra mundial podrían ascender a cerca de 15 billones de dólares, mientras que la pandemia de coronavirus costaría hasta 30 billones de dólares a la economía global. Esto es tres veces más que el costo de la Gran Recesión, que se estima en 10 billones de dólares, y 30 veces más que las consecuencias de un ciberataque a gran escala.
Los cinco sectores que están más expuestos a los 'shocks' considerados representan unos 4,4 billones de dólares en exportaciones anuales, o alrededor de una cuarta parte del comercio mundial. Se trata de industrias que producen equipos de comunicaciones, indumentaria, productos del petróleo, equipos de transporte y minería. Los menos expuestos son alimentos y bebidas, productos farmacéuticos, metales fabricados, productos de madera y dispositivos médicos.