Una muchacha arrodillada junto al agua, vierte en un estanque el contenido preciado de sus dos ánforas: la esperanza y el regreso.
Si aparece al derecho, significa muy buenas perspectivas para el futuro, con un camino despejado que el consultante puede recorrer sin miedo, gracias a sus esfuerzos anteriores. Es en definitiva una recompensa. Cuenta con la fortuna de las estrellas, teniendo a su favor numerosas cualidades que le apoyan, inteligencia intuitiva, optimismo, confianza en sí mismo, calma, armonía, que le serán muy valiosas para ese triunfo.
Profesionalmente, sobre lo relacionado con el arte tiene óptimas posibilidades de éxito. Interés acentuado por la moda. Pasión por el arte.
En el plano afectivo, indica un nuevo amor romántico y tierno. Una relación duradera destinada a llegar al matrimonio. Un encuentro, nuevas relaciones, conocerá a alguien con un futuro sentimental feliz. Esta carta anuncia un nacimiento en la familia.
Como persona, aparece una buena consejera, equilibrada y desinteresada.
Si aparece invertida significa todo lo contrario, un periodo difícil y carente de oportunidades con actitudes contradictorias
Profesionalmente compañeros envidiosos. Trabajo mal retribuido. Insatisfacción.
En el plano afectivo frialdad en la pareja, desinterés mutuo. Un embarazo no deseado.
Como persona aparece un individuo mediocre, frío y falso.
El efecto de esta carta es lento teniendo una duración de la previsión de uno a tres meses.